lunes, 28 de enero de 2013

Por mínimas que sean, nuestras acciones dejan consecuencias. 
El mintió, porque alguien le creyó.
El cayó, porque nadie lo escuchaba.
El lloró, porque alguien logró que lo hiciera.
El se levantó, porque alguien hizo que se cayera.
El no confió, porque alguien rompió su confianza.
El no quiere, porque jugaron con sus sentimientos.


jueves, 17 de enero de 2013

No me gusta extrañar, es una palabra cargada con mucho sentimiento. Es una palabra que tiene mucho peso y que las personas lo dicen todo el tiempo, te tiran un "te extraño" así como si nada. Extrañar es algo muy fuerte, es un vacío en el alma que no se llena a menos que veas eso que extrañas. Así que si hablamos de extrañar a una persona que está allá arriba se imaginarán lo que duele y que no tiene fin, dado que mientras vivamos acá no los vamos a ver más salvo en nuestra memoria. Otra cosa es extrañar a una persona que está a distancia, a kilómetros tuyo, que sabés que la vas a volver a ver. Para algunos también puede ser doloroso, por eso no me gusta extrañar. 
Porque si extrañas a alguien significa que a esa persona la querés. 
Porque si extrañas a alguien significa que a esa persona la necesitas.
Porque si extrañas a alguien significa que es importante en tu vida.
Porque si extrañas a alguien significa que una parte tuya no quiere dejar de verlo.
Porque si extrañas a alguien significa un poco de sufrimiento.
Porque si extrañas a alguien significa que todavía estás vivo.
Porque si extrañas a alguien significa que bajo toda esa capa de pieles, entre los músculos y los huesos, tenés un alma que es frágil.